viernes, 13 de noviembre de 2009

La Masturbación Femenina y Masculina


La masturbación, tanto femenina como masculina, es algo muy íntimo y personal, a cada uno nos gusta tocarnos o que nos toquen, de alguna manera en particular, cada cual tiene sus preferencias.
Las chicas solemos tardar más, en descubrir esa sensación tan agradable que nos proporciona el roce del dedo en el clítoris, lo mismo es porque como lo tenemos tan escondidito, pues tardamos algo más que los chicos en encontrarlo, ya que como a ellos su cosita les cuelga… el contacto con el pene es más temprano.
Pero la masturbación no es solo frotarse con el dedo el clítoris o abrazar con la mano el pene mientras sube y baja, ha de ser algo más, porque cada centímetro de nuestra piel nos trasmite sensaciones diferentes cuando la tocamos, la rozamos o la pellizcamos.
Hay mil formas de disfrutar la masturbación femenina, a la vez que estimulamos el clítoris, podemos estimular la vagina con la ayuda de algún vibrador o consolador, provocando mucho más placer en el cuerpo de la mujer; humedecernos los dedos con saliva y restregarla por los pezones, ya que cuando tenemos los pezones húmedos y estos entran en contacto con el aire notamos una sensación de frescor, e imita a un pequeño y suave aliento en nuestros pezones, esto a muchas mujeres las vuelve locas, arrastrar la punta de los dedos por nuestro cuello hasta el escote y realizarnos pequeños pellizcos en el pezón e incluso tocar o magrear nuestros propios senos, pasar la mano entre los muslos a la vez que tocamos nuestra vulva, no solo el clítoris, ya que toda esa zona nos proporciona un enorme gusto y placer, labios mayores y menores, perineo e incluso la estimulación anal, con el dedo o con un vibrador indicado para esta zona, y la utilización de lubricantes con sensación de calor o frescor dan mucho más juego, más sensaciones para disfrutar de una masturbación mucho más completa. Y la masturbación sumergida, esa es ideal es estimular todas las zonas anteriormente descritas pero debajo del agua, en la bañera, en un jacuzzy, en la piscina o la playa, esta última es de alto voltaje ya que el placer se multiplica gracias al morbo que da poder ser descubierta; y si a todo esto le añades tú imaginación…acabarás…agotada y mojada, muy mojada y no precisamente de sudor, ni de agua.
Y otras mil para disfrutar de la masturbación masculina, cada hombre tiene un modo de agarrar o abrazar su pene, unos lo hacen con la mano completa, otros con el dedo pulgar e índice, con la utilización de vaginas vibradoras, bocas vibradoras o con el revolucionario huevo de tenga. También buscan más estímulos rozando sus manos con los testículos, estimulando con el dedo el perineo e introduciendo el dedo en el ano y así gozar del placer que le provoca su punto P (la próstata), es el punto G del hombre, lo único malo es que a muchos les da pavor tocarse esa zona ¿no sé por qué? ¡Con lo que les gusta a ellos la nuestra!, pero aquel, que lo ha probado, le encanta o no lo cuenta y quizás no lo llegue a saber ni su pareja y solo sea su gran secreto en la intimidad de su masturbación. Increíble ha de ser su estimulación, ya que al elefante, el veterinario especializado le introduce su brazo por el ano, dándole placer estimulándole la próstata con el movimiento del brazo hasta que el elefante eyacula y así obtienen la muestra de su semen; sin necesidad de tocar el pene ya que este por su gran medida y por los movimientos tan rápidos que hace cuando llega el momento del orgasmo a más de uno le ha dado literalmente en el ojo y se lo ha dejado más que morado. Moraleja, los hombres podéis eyacular sin necesidad de tocaros el pene.
El movimiento y el ritmo de la mano también depende de cada hombre, a unos les gustará despacio, a otros rapido, etc. Pero para explicar, la gran variedad de las diferentes maneras que hay para tocar un pene, no hay nada mejor que ver detenidamente este vídeo y aprender las que no sabes y mejorar las que sabías. Espero que os guste.